Ene
2024
VAGINISMO SECUNDARIO EN LA PERIMENOPAUSIA Y MENOPAUSIA
by Sexologia Pamplona | in Sexología Clínica | 0 comments
El vaginismo secundario es muy frecuente en esta etapa de la vida de la mujer causando una sensación de impotencia a las mujeres que lo sufren. Su actividad sexual -hasta este momento normal- se ve amenazada por la imposibilidad de penetración.
En esta esta se puede dar un círculo vicioso: Ponerse una crema lubricante para facilitar el coito, pero la rápida absorción del lubricante hace que su efecto sea de corta duración por lo que en muchos casos no funciona para esta necesidad concreta. Lo anterior hace que se suela cambiar de crema, usando otra que tampoco resuelve el problema y así va pasando el tiempo.
La imposibilidad de penetración también se da en las revisiones ginecológicas siendo éstas muy dolorosas o imposibles.
Causas del vaginismo secundario
La disminución o desaparición de los estrógenos que produce grandes cambios en el cuerpo de la mujer.
Cambios hormonales
Los estrógenos tienen como efectos a nivel vaginal el engrosamiento de la de la pared vaginal y el aporte de nutrientes, facilitando la lubricación por vascularización vaginal.
En la perimenopausia y menopausia los estrógenos producidos por los ovarios disminuyen sus niveles en sangre, adelgazando las pareces vaginales, así como aumentando el PH (cambio de la flora vaginal) y disminuye el aporte sanguíneo.
Los síntomas pueden ser los siguientes:
– Sequedad vagina
– Dolor en las relaciones (dispareunia)
– Escozor o ardor al orinar (disuria)
– Pequeños sangrados vaginales
– Ardor en la vagina
– Inflamación vaginal
Hipotonía del suelo pélvico
Debido a los cambios hormonales y otros factores, el suelo pélvico también sufre alteraciones. Cuando está debilitado puede favorecer la incidencia del vaginismo secundario.
Los síntomas pueden ser los siguientes:
- Perdidas de orina al toser, reír o saltar.
- Sensación de pesadez en el bajo vientre.
- Descenso de una o más vísceras (prolapsos).
- Incontinencia de gases o heces, o mixta.
- Incontinencia de urgencia al no llegar a tiempo al WC.
- Estreñimiento.
- Disfunciones sexuales.
Tratamiento del vaginismo secundario
Un vaginismo se puede superar de las siguientes maneras:
De modo autónomo
Se puede resolver siguiendo una guía. Esta opción requiere adquirir la habilidad necesaria y mantener la constancia. La mujer deberá iniciar un camino conocimiento de su sexualidad y sensualidad femenina, y de autoconocimiento y conexión consigo misma.
Con sesiones presenciales
Dependiendo de la orientación de ayuda elegida (Psicología, Sexología, Shiatsu, Tantra o fisioterapia) las técnicas cambiarán, pero en muchos casos mantienen cosas en común, como el fomento de la educación sexual, el autoconocimiento, el uso adecuado instrumentos como dilatadores.
En la primera visita además de atender a los datos bibliográficos (edad, estado de la regla o año de la menopausia, número de hijos, sucesos traumáticos etc.) de cada mujer se dará escucha a la parte emocional, ya que un vaginismo secundario conlleva un dolor personal a menudo en pareja. La mujer se puede encontrar desorientada, con sentimientos de impotencia, enfadada o molesta por no haber recibido o encontrado ayuda. En muchos casos hay una historia de intentos fallidos en la penetración.
Lo primero que se suele recomendar a nivel físico es mantener bien hidratada tanto la vulva como la vagina. Un buen hidratante externo y también externo terminará con gran parte de las molestias de la penetración. La hidratación ha de realizarse de forma diaria masajeando la zona, llevada a cabo por la propia mujer o también por la pareja. Puede ser muy útil un espejo para observar el estado de su vagina y su evolución.
Se recomienda ejercicios Kegel de contracción y relajación perineales, y sus variaciones, ya que aportan tonificación, ayudan a vascularizar la zona, la flexibilizan y la normalizan; beneficios muy importantes cuando la vagina está rígida e inflamada.
El uso de dilatadores está indicado para ganar diámetro de forma gradual tanto en la entrada como en la vagina. A continuación, cuando la vagina se sienta más confortable, será aconsejable el uso de vibradores.
Es importante cada vez que se aplican los dilatadores conseguir la relajación, hidratación, dilatación y apertura del introito vaginal, para conseguir que la vagina se vaya abriendo gradualmente.
Si quieres conocer con detalle cómo realizar estas técnicas y tener una guía personalizada y un acompañamiento emocional, no dudes en contactarme. Asesoramiento sexual con Vidal Higuera, contactando con SexologíaPamplona .
Etiquetas: Disfunciones Sexuales, Educación Sexual, Pamplona, sexología